Lo mejor del cine en corto

Entrevista con Diego Ureña y Mariano Gómez: directores del cortometraje “La Ventana”

La colaboración de Diego Ureña y Mariano Gómez fue fundamental para esta obra audiovisual, un trabajo planificado y en orden los ha distinguido en sus proyectos, y una de sus habilidades trabajando juntos es que logran avanzar mucho en cuestión de poco tiempo.

Ahora su cortometraje se destaca en una de las secciones más esperadas del Festival shnit 2024, fue seleccionado para la Competencia Nacional, MADE IN COSTA RICA. En esta entrevista, Diego y Mariano nos cuentan cuáles fueron los desafíos y su inspiración para este corto.

¿Cuál fue su inspiración para iniciar en el mundo del cine y la producción audiovisual?

Diego: Yo soy músico desde pequeño, entonces yo creo que todo esto de del arte, como que siempre ha estado ahí alrededor mío. Nunca me he considerado un gran instrumentista, pero creo que crear si me gustaba, entonces me fui por compositor, entonces mis canciones básicamente eran como historias de amor. Eso sí, eran historias, entonces, crear algo, inventar algo, contar algo, es como mi pasión más allá de cuál área. 

Poco a poco, con estas camaritas, las cyber shot, un amigo tenía una, y tenía que hacer un trabajo del colegio y me pidió que le ayudara, yo no sabía absolutamente nada, pero con las cosas que uno ve, dije, bueno hagamos una toma así y otra así, de hecho yo participo en el mismo video, y ese primer video dije yo,  ese es como el camino, tiene música, tiene visual, tiene narrativa y ese momento es el que hizo que yo quisiera meterme en esto, hace muchos años.

Mariano: Yo también considero como que me encanta crear de diferentes maneras y también muy joven tuve la oportunidad de usar la camarita de un primo pequeñita, esa no era cyber shot, era una cámara que había sacado ofertel miniatura que grababa video uno no  podía ni ver los que grababa, pero era un juego ahí. Me acuerdo de que la usamos, grabamos cosas y luego nos metimos y luego nos metimos a Windows Movie Maker y ahí seguimos un recorte de cosas y para nosotros fue como magia poder ver algo creado por nosotros y ponerle unas transiciones, música de fondo y fue una oportunidad de tener contacto con la creación directamente.

Después tuve oportunidades en el colegio de hacer como ciertos, digamos que, no eran videoclips, eran como sketch más bien. Y esa capacidad de poder ver algo reflejado ahí y luego entonces entender que podía plantearse un poco para que quedara mejor, fue como un ejercicio muy orgánico y de pronto, la vida nos fue abriendo más como oportunidades para ponernos en el tema de video y yo siempre he sido muy experimental en el tema de video, o sea, nunca llevé una carrera ni nada, nunca inclusive ahora ya más viejo me niego a aprender cosas de la cámara. O me niego a aprender cosas donde yo no me quiero hacer experto, pero sí me gusta mucho ver cómo lo ejecuta la gente.

Yo me sentí inspirado realmente, con una película específica que vi, que es una película mexicana, se llama Amores Perros, cuando vi esa película, creo que lo que había visto antes y lo que vi en esa película me cambió, como la perspectiva, y entonces, en ese momento, se me había metido la locura de yo quiero ser cineasta, que para el presente ha cambiado mucho, yo ya no quiero ser cineasta, pero si es un arte que siento, que envuelve tantas cosas como la música como la escritura, como lo que es, la capacidad de contar historias por fotos. Entonces el cine lo veo como un espacio muy amplio para una cantidad de artistas diferentes, donde me encanta también participar desde algunos puntos, por ejemplo, con la escritura, como con el proyecto general y demás, siento que con esa película me inspiré mucho también.

¿Qué los ha influenciado a ustedes en el tipo de cine que producen?
 
Diego: Definitivamente, uno todo lo que consume viene del cine comercial, los principios de pequeño casi creo lo que uno consumía eran estelares del 7 o las películas que pasaba en el 7, entonces creo que definitivamente sería mentira decirte que no estoy influenciado por este cine comercial de Hollywood.

Originalmente, lo que me apasionó fu hacer fotografía, me apasioné por aprender todo lo que se tenía que hacer, para llegar a que mis películas se vieran, como las de estos grandes directores de Hollywood y los grandes directores de fotografía. Entonces los movimientos de cámara que propongo, los cuadros que propongo desde la dirección de foto, tiene muchísimo del buen cine comercial.

Sin embargo, cuando experimento todo esto y empiezo a meterme un poco más en narrativa y a co-dirigir, pues como que hay una pasión hacia el cine latinoamericano, ahora definitivamente me encanta el drama latinoamericano, la narrativa latinoamericana, y yo creo que en algún momento como que la gente lo rechaza y dice: ¡Ay, mae para qué vamos a poner más tristeza!, y yo creo que hay maneras muy bonitas de contarlas, como decía Mariano, esta película de “Amores perros” está dirigida y escrita de una manera súper diferente a lo que siempre se ha hecho en el cine latinoamericano; sin embargo, siempre refleja lo que somos y deja esa constancia en el tiempo. 

Hace poquito, leí que el cine es un documento que te va marcando e impregnando la historia y dejándola para siempre, aunque sea una ficción, por ejemplo, este cortometraje que hicimos Mariano y yo, refleja lo que es, una mamá costarricense en la época del 2021.

Mariano: Yo pienso que uno de todo lo que consume en la vida agarra poquitos, entonces de la escuela yo me acuerdo mucho de Hércules, de como enfrenta todas sus batallas, que al final es lo que habla Diego, de la historia comercial que nos cuenta, la escritura comercial de la película, mucho Disney. 

A mí personalmente lo que me gusta sentir cuando veo una película es que me contaron una historia, que me fui en el viaje de algo, que sufrí, que me divertí, sin irme por ningún género tampoco, puedo disfrutar tanto una comedia o una película latinoamericana que es como más drama, pero un buen guion y entonces lo que he hecho es encontrar más influencia en los libros que en las películas. Para mí la fuerza está en una historia, y cuáles elementos de la historia, y como se cuenta la historia, y a partir de ahí algún día espero sentirme con la capacidad de hacer cine.


Hablando propiamente del cortometraje La Ventana, ¿cuál fue la inspiración para crear esta obra?

Mariano: La inspiración de La Ventana era retratar a un personaje que se pareciera mucho a mi abuela, en cuanto a su historia de vida y su forma de llevar el mundo, una señora que nació en Guanacaste con pobreza, las vidas eran muy duras, desde los 3 años mi abuela era la mamá de sus hermanos, no pudo ir a la escuela, vivió frustrada, se casó con un cualquiera para salir de la casa, todas estas cosas de la vida de ciertas épocas, obligó a las mujeres y se reflejan es unas personalidades rígidas, demasiado falta de entendimiento, de sensibilidad, son estas mujeres que lo hacen porque así que ser y no porque lo puedes escoger.

Entonces, yo siento que cuando empezamos a escribir todas mis ideas venían de imaginarme a mi abuela reaccionando, y no digo que sea una mala persona, pero es que era regañona, estricta, cruda y súper directa. Inspiración en ese sentido de personaje y estilo.

Otras de las inspiraciones, era que estábamos practicando, ciertos métodos de actuación con las chicas que nos ayudaron, que eran súper de improvisación.
Me acuerdo que teníamos ahí el libro a la par, y hacíamos los ejercicios que íbamos a aprendiendo con ellas, como para probar eso también, porque por lo menos de nuestra escuela, Diego si estudió audiovisual, yo la verdad es que no estudié nada, pero creo que ninguno de los dos estudió dirección actoral, que es un desarrollo enorme, entonces es un tema enorme, es una escuela que hay que llevar o que se aprende y nosotros dos ya llevamos 3 años dirigiendo comerciales con actores de todo tipo, con cosas de todo tipo, y dijimos, metámonos en una bronca desconocida, dirijamos un drama con actor, con actrices reales y llevemos un método para ver qué surge de acá.


Diego: Estábamos en un momento que cada una de las oportunidades que teníamos para grabar algo de ficción y propio, que no es nada fácil, no todo mundo puede rodar algo así, cada una de las oportunidades lo tomábamos como un taller para nosotros,  hay algo que proponer, hay algo para aprender, que podemos hacer mejor que en los pasados, yo sigo con esa mentalidad, esta pieza en lo personal a mí me encanta, desde el principio Mariano y yo cada uno desde área de sensibilidad, a Mariano se le da muy bien escribir los textos de los guiones, a mí un poco más de estructura, entonces proponer hacer algo pero con un poco más de estructura. Ambos lo vimos como una oportunidad de proponer, hacer más cosas y aprender.

¿Qué mensaje esperas transmitir a través de La Ventana?

Diego: No es tanto un mensaje, sino un sentir, hay emociones intensas y que no esperen nada más, solamente que se sienten a recibir lo que La Ventana tiene para darles, son bloques de emociones intensas una y otra vez, es un bloque que termina con una emoción intensa y empezamos desde abajo, a volver a entender, a volver a sentir, cierra con una emoción que está para muchas interpretaciones, entonces eso, que más que entender que se deje sentir, y que disfrute el viaje, que es un viaje corto.

Mariano: El objetivo que tiene el guion es ese viaje de sentires que al final vamos al cine y vemos una película y a cada quien le llegó por un lado diferente, y es como un guion natural, bueno, te conecta con cosas personales, aunque no sea la misma historia, más que un mensaje es un sentir.

Diego: Sí, de fijo, hay un trabajo muy bonito de evolución de los personajes, creo que eso también es muy tuanis y es algo que Mariano y yo tratamos de implementar como una práctica, este tema del personaje se quita sus máscaras, esta señora que es super tosca y brava lo que queríamos era que terminara débil, y la chica que es la contraparte, es una chica con miedos y débil, y se quitara su máscara y tomara la batuta. La primera capa del cine son las emociones.

Durante la grabación, ¿enfrentaron desafíos creativos o técnicos?, ¿y cómo lo superaron?

Mariano: Si algo ya habíamos practicado mucho a nivel de comerciales o presupuestos grandes era saber planificar una producción para que la menor cantidad de imprevistos sucedan, Diego y yo tenemos esa fuerza, no solo es hacer la producción, si no también es hacer el trabajo previo, casi que cronometrado, y no hay producción en la que uno no se salga de los tiempos del plan de rodaje o donde nos quedemos en una toma donde se hace 7 veces y estemos sobre estresando a la actriz, en este caso, pero desde mi perspectiva estuvo normal. A nivel técnico, desde las ejecuciones siempre hemos sido un equipo muy claro a la hora de lo que hay que hacer. Siempre he confiado que la pre producción es lo que dicta una buena producción. Tenemos la capacidad de hacer mucho en muy poco tiempo.

¿Cuánto tiempo duraron grabando el corto?

Mariano: Dos jornadas de 5:30 p.m hasta las 2:00 a.m.

Diego: Como dice Mariano, creo que somos muy ordenados en este sentido, creo que la parte creativo va antes, igual lo disfrutamos mucho, no quiere decir que el esfuerzo no fue muy grande, Mariano y yo, a pesar de que teníamos un presupuesto, pues nunca alcanza, entonces el día antes bajando los muebles, imprimimos un papel tapiz para que la casa tuviera ese estilo, montamos todo el arte, entonces para nosotros fueron tres palmadas, la noche anterior preparando todo, el día de rodaje número uno y el día de rodaje número dos.

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